saunas baratas

Se renueva y se suaviza la piel, se liberan toxinas, los bronquios se dilatan, se estimula la circulación sanguínea y mejora el ritmo cardiaco. Éstas son algunas de las ventajas de usar la sauna, un método de relajación ancestral que hace que se evaporen los problemas y los ‘malos humos’. Poder disfrutar de un baño de calor durante unos 15 minutos suena muy bien si lo que queremos es relajarnos después de un duro día de trabajo. En hoteles, gimnasios, spas, balnearios y demás centros de salud y de belleza podemos encontrar uno de estos cuartos de madera pensados para una mayor relajación. Pero si queremos sacarle el máximo provecho, lo más recomendable es montar una de las saunas baratas que encontraremos a un precio razonable en el mercado en nuestra vivienda.

Pero, ¿qué sitio de la casa es el más adecuado para instalar saunas baratas? Siempre que haya espacio suficiente para ello podemos colocarlas en la terraza o en el jardín. También están los que prefieren hacerlo en el baño. El único requisito a tener en cuenta es que el rincón del hogar elegido para su instalación debe contar con buena ventilación y poca iluminación.

Cualquier precaución es poca, por lo que a la hora de instalar una de las saunas baratas, conviene colocar un cierre automático en la puerta y recubrir los asientos para evitar las quemaduras.

En Avilsa, una empresa especializa en la fabricación a medida de saunas baratas, encontraremos una gran variedad de modelos, desde las más clásicas hasta las más vanguardistas, para el exterior como para el interior, con equipamiento de serie al que podemos añadir extras y mejoras en función de nuestras necesidades y del dinero que estemos dispuestos a gastar. Pueden rondar desde los 1.800 euros hasta los 10 mil. Estas últimas para las economías más asentadas.

El precio, como en todo, varía en función del tamaño: cuanto más grande, más cara. Por lo que si nuestro presupuesto es reducido, no debemos desesperar ya que hay empresas como Avilsa, donde encontraremos saunas de pequeñas dimensiones que se adaptan perfectamente a nuestra demanda y espacio.

Antes de iniciarnos en el mundo de los baños calientes, debemos saber que quienes padecen hipertensión o cardiopatías deben consultar a su médico. Según los expertos, tampoco es bueno alargar las sesiones más allá de 15 minutos ni acudir más de tres veces en un mismo día si no queremos que los beneficios del vapor de agua se conviertan en contraindicaciones.